Aunque un aumento superior al 40 por ciento en el desempleo de la construcción en apenas un año es más que preocupante, lo cierto es que los datos del resto del país pueden servir como un pequeño consuelo para la administración castellano y leonesa. Y es que desde el pasado mes de mayo hasta el actual, la subida, siempre con cifras espectaculares, ha sido de prácticamente veinte puntos más en España que en la región. En concreto, los algo más de 4.700 ciudadano de la Comunidad que se han visto obligados a «dejar» el sector representan un aumento del 43,34 por ciento, mientras que los casi 195.000 que lo han hecho en el resto del país suponen un incremento del 62,95 por ciento. La lectura de los datos permite concluir que la crisis de de la construcción tiene una incidencia muy superior en otros puntos de España como ya habían adelantado en diferentes intervenciones tanto el presidente de la Junta como los consejeros de Economía y Hacienda. Para el viceconsejero de Empleo, José Ignacio Ariznavarreta, «lo que se demuestra, mes tras mes, es que éste es el único sector en el que sistemáticamente crece el paro». En su opinión, «esto va a ir, parece, «in crescendo»» y aunque «estamos aplicando otras políticas -en especial, la reorientación laboral de los trajabadores- la sangría no se va a atajar». Al menos, Ariznavarreta recuerda que «el ritmo de destrucción del empleo en la construcción es veinte puntos menor en Castilla y León que en España», lo que «demuestra que el tejido productivo de Castilla y León es distinto y la dependencia sectorial es menor, por suerte». Según el viceconsejero, «la construcción en Castilla y León está más saneada y no es tan dependiente de lo que se conoce como «el pelotazo»».
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